Según las cifras del Departmento de Seguridad Nacional (DHS por sus siglas en inglés), durante el mes de enero del presente año, los EEUU deportaron 2,185 nacionales haitianos hacía su país. ¿Por qué es entonces que el gobierno americano condena le repatriación de haitianos ilegales por la República Dominicana? ¿Acaso nuestra soberanía y el respeto por nuestras leyes tienen menos valor que las de nuestro vecino al norte?
El haitiano NO ES de ni parte de nuestra cultura. Es irrelevante que compartimos una isla y mucho menos que Almagro y su estirpe en la ONU imaginan una fusión de los dos pueblos. No hablamos patois aquí y no hemos olvidado los atropellos de los haitianos durante su ocupación de nuestra tierra. Fusión. Jamás NUNCA aceptaremos una pendejada de semejante jaez. Fue un acto demasiado bondadoso la Ley 169-14 que oferta una vía legal para habitar en la Dominicana el haitiano. Los que no se aventajan de dicha ley merecen ser deportados sin demora. Igual, tampoco podemos tolerar que mujeres haitianas embarazadas entren el territorio nacional con el único fin de dar a luz. O sea para parir niños “ancla” que gozan de ciudadanía (cosa en contra del TC) o para aprovechar del sistema de salud dominicano, irregular es IRREGULAR y el aprovechmiento es otro atropello haitiano. La República Dominicana tiene sus propios problemas graves con la pobreza, falta de oportunidad educativa y profesional. No queremos NI PODEMOS encargarnos de Haiti
Danilo, manos a la obra, señor.